¿Quién dijo que es posible estar a tope en todas las áreas de la vida? ¿Alguien pensó alguna vez que eso era lo mejor? ¿Cuál es el verdadero equilibrio?
—Imagen @Ediciondeaudio
—Por @Tofu
¿Qué respondés cuando te preguntan “cómo estás”? ¿Respondés genéricamente con un “bien, ¿vos?” o con el estado real de las cosas? Confieso que me tienta demasiado responder algo como “bien, pero…” y ampliar la información con algún percance que entorpece la idea que nos creamos del “estar bien”, esa la felicidad absoluta. A veces creemos que para estar en paz con la vida, todo tiene que estar equilibrado, que sólo así podemos “estar bien”.
Es cierto que si un área de la vida está complicada, eso repercute en el resto. Si estoy desempleada, difícilmente eso no interfiera en mi ánimo a la hora de vincularme con mi familia, pareja o amigos. Y si estoy con temas de salud que me preocupan, tampoco es tan simple brillar, laboralmente o a la hora de rendir un examen. De todas formas, tendríamos que aprender a vivir lo mejor posible con la situación actual, sea la que fuere, ¿verdad?
Hoy te acerco dos metáforas o visiones referentes al equilibrio que personalmente me ayudan mucho .
1. Homeostasis emocional:
En el secundario, en biología, me enseñaron una palabra que me parece muy propicia para hablar de equilibrio: homeostasis o la capacidad del cuerpo de mantener un ambiente interno estable y relativamente constante, más allá de los factores externos. Esto involucra montones de procesos como la regulación de la temperatura corporal, la concentración estable de diversos iones o la glucosa en sangre y el pH. Si estos valores aumentan o disminuyen demasiado, podemos enfermarnos seriamente.
La transpiración es parte de este proceso. Cuando la temperatura sube demasiado, el cuerpo tiene un mecanismo para bajar y recuperar la temperatura promedio. Concluimos que sudar es entonces, una herramienta espectacular para mantener al cuerpo en estado de equilibrio. ¿Me siguen?
Es importante tener la perspectiva necesaria para que cuando un área de nuestra vida no está de buenas o por el contrario, requiera de nuestra atención, podamos mantenernos medianamente estables en el resto de nuestros aspectos.
Sin ponerme gede ni demasiado técnica con la homeostasis que es un proceso vastísimo, me sirve de metáfora para retomar el punto inicial de esta nota: así como el cuerpo tiene su mecanismo de autorregulación para mantener los valores que lo hacen estable, ¿qué herramientas usamos o tenemos para hacer lo mismo con nuestro mundo emocional? ¿Cómo mantenemos nuestro equilibrio emocional y mental cuando las cosas no salen tan bien? ¿Podrían hacer una lista de herramientas?
Acá listo algunas de mis herramientas:
- Repetir frases positivas como mantras: “todo va a estar bien”, “ya estás de salida”, “esto pasa y pronto”, “eso que tanto deseás, va a suceder”. Las digo, las canto, las hago board, las escribo con la pluma de mi mente, tanto que me las termino creyendo.
- Tomarme momentos de diversión pura en medio de un maremoto. Recuerdo cuando me fui en avión para una operación de mi vieja y cuando llego en plena cirugía no me dejaban entrar al sanatorio. Podría haberme quedado en la puerta esperando, pero en cambio me fui a la vuelta a tomar un vino con mi amiga del alma. El nivel de descompresión que creó ese momento, lo tengo tatuado en el cuerpo.
- El humor, reírme de lo que me pasa, escribirlo, compartirlo. De esa forma no evado lo que me pasa, lo exorcizo.
- Pasar tiempo a solas para trabajar la escucha interna.
- Rodearme exclusivamente de gente que empatiza con mis issues.
Ejercicio: ¿Qué herramientas usan para mantener la “homeostasis emocional”?
Escribí una lista de herramientas reales y potenciales. Mínimo 5 ítems. Tené la lista a mano cada vez que la contrariedad toca tu puerta.
Ya entendimos que nunca todos los aspectos de nuestra vida brillan, ni están al mismo nivel y es justamente ahí donde entra la segunda metáfora de la fecha.
2. La vida como una consola:
Esta metáfora la inventé porque en varios momentos de mi vida tuve contacto con consolas de audio: cuando estudié ingeniería de sonido y cuando trabajé en radio. Y veía cómo el ingeniero u operador regulaba cada pista individualmente, para lograr un combo final, un todo, una mezcla: subía o bajaba voces, metía alguna pista de audio, agregaba efectos, ecualizaba, etc. Porque en las consolas cada micrófono o entrada de audio entra por un canal distinto. Entonces se puede individualizar cada uno y darle el tratamiento deseado.
Me fascinaba ver los dedos del operador tomando el fader y bajando o subiendo el sonido de ese canal. Y es justamente desde los faders, los “cositos” esos que suben y bajan por una canaleta, que creé esta idea.
Pensando en que la vida es una consola, te acercás a la idea de que una va todo el tiempo graduando la potencia de las distintas áreas de la vida. Nunca están todas arriba o todas abajo, a no ser que hayas hecho la murisión o no hayas nacido. Es imposible tener todos los faders a tope al mismo tiempo, porque simplemente en la vida de los mortales de este planeta es imposible sostener el mismo nivel de atención (y de “volumen”) en todas partes. Es demasiado, te saturás antes.
Una le va dando importancia o atención a distintas cosas por etapas, según deseo o requerimiento. Entonces cuando me encuentro con cosas en la vida que requieren de mi atención, subo el fader que abarca esa área, cual operadora de mi vida:
Si acabás de ser mamá, probablemente tu fader de maternidad/familia esté a tope, si recién migraste hacia otro continente los faders que involucran al hogar, el trabajo y los trámites engorrosos estén arribita de todo.
No hay una fórmula, o una mezcla perfecta, porque cuando nos acomodamos laboralmente después de un patatús, nos viene un tema de salud, o el dueño del depto donde vivimos y amamos, nos dice que está por vender y que en 3 meses hay que mover. O cuando creíamos que la dualidad “madre y emprendedora” encontró cierto ritmo, zaz! Algo surge que nos obliga a reprogramar y armar una nueva mezcla.
Si hoy tuviese que pensar en armarme una consola tendría las siguientes perillas. Pueden usarla de ejemplo para confeccionar la propia:
- Trabajo, vocación: de lo que vivo, a donde me gustaría llevar, mi misión, mis proyectos futuros.
- Vínculos amorosos: pareja, pololos, salientes, matches, seres que tiran fueguitos.
- Vínculos amistosos: las de siempre, las nuevas, grupos sociales varios.
- Familia/maternidad: la de origen y la armada, si la hay. Hijos, padres, la entidad global de la familia tanamente hablando.
- Diversión: tiempo libre, descanso, lecturas, disfrute.
- Estudio: siempre estoy aprendiendo algo, aunque sea un curso de grabación de voces para podcasts.
- Cuerpo: salud, cómo me estoy sintiendo y todo lo que hago a por ella. Actividad física, alimentación, yoga, meditación, etc.
- Viajes: que nunca me falten, aunque eso implique escaparme por el día en la chata a Miramar.
Esta teoría busca amigarse con esta alternancia, con la idea de que una va haciendo su propia mezcla, cual ingeniera de grabación y que esa mezcla se va remezclando todo el tiempo: un remix en tiempo real. Hay que amigarse con la idea de la impermanencia de esa mezcla e ir adaptándose a esos cambios.
Ejercicio: Creá tu propia consola y armá tu mezcla del día
Las invito a hacer un ejercicio personal: dibujen una consola que abarque a cada una de las áreas de su vida. Ahora, asígnenle una ubicación (dentro del espectro de todo el canal del fader) a esa área particular, en el momento presente. El centro del canal por el que corre el “cosito” es el equilibrio ideal. Así pueden ir observando que, si andan pesimistas porque algún aspecto no es tan feliz, seguramente no le están prestando atención porque algunas otras áreas, que gozan de muy buena salud, se están llevando el volumen.
Pueden hacer una por semana o por mes, e ir chequeando qué sube y qué baja. Es una excelente forma de tener perspectiva del momento que vivimos, de agradecer lo bueno, de no dar por definitivo nada de lo que nos pasa.
“Es importante nunca bajar del todo ciertos faders que son pilares de tu integridad.”
Sea el que fuere tu edit, subas o bajes lo que fuere, es importante nunca bajar del todo ciertos faders que son pilares de tu integridad. En mi caso, el cuerpo es importante porque estoy llena de nanas y no me puedo dar el lujo de soltar el yoga, comer mal o dormir menos de 7 u 8 horas durante demasiado tiempo, porque si no, toda mi mezcla de va al demonio y mi homeostasis tanto emocional como física se desarticulan completamente.
3 comentarios
Una de mis “herramientas” es bailar, en el baño del laburo, en mi casa sola o con mis hijas, mover el cuerpo, revolearme las ideas.
Espectacular esa consolaaaaaa 🙌
Me copó la idea de la consola. Es muy fácil de visualizar y registrar cada momento como parte de la vida que va siendo y transcurriendo en permanente movimiento. Gracias! Divina nota, para guardar y revisitar
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